jueves, 3 de enero de 2008

SERVICIO DE MANTENIMIENTO TÉCNICO


Ser técnico de mantenimiento está bastante bien, al menos en comparación con otros muchos empleos. Trabajo en la Pensión Bienvenido desde hace ya varios años, gano un buen sueldo y mi horario, aunque rotativo, me permite tener vida propia. Mi nombre es Adam White y controlo instalaciones de baja tensión, calderas, acondicionamiento de aire y fontanería, entre otras cosas.

Aunque pueda parecer un trabajo mecánico y monótono, lo cierto es que las instalaciones de un hotel son suficientemente complejas como para que el número de posibles averías tienda casi a infinito. De todas formas, recuerdo que una vez un inquilino me describió con detalle una operación de apendicitis mientras yo arreglaba la bomba de calor de su habitación, y en ese momento pensé que, por fortuna, las instalaciones de un hotel no eran tan intricadas después de todo.

Ahora bien, cuando en alguna ocasión alguien me ha visto inspeccionar una instalación y me ha preguntado por el diagnóstico, sí que he pensado en un paralelismo médico. En esos casos, y para darme un poco de autobombo, yo siempre he mencionado que se trataba de un diagnóstico reservado (aunque en realidad fuera una avería trivial).

Por cierto, si estás pensando que mi nombre es insólito, aún comprobarás que pocas cosas dentro de la Pensión Bienvenido pueden considerarse comunes o corrientes.