lunes, 7 de enero de 2008

Mi primer día en Sevilla

En principio la recepcionista no me ha hecho demasiadas preguntas. Se ha tragado eso de que soy estudiante y que a estas alturas me han dejado colgado con el piso mis compañeros y he tenido que buscar una pensión mientras busco otro. Aunque es mas caro, no tengo ganas de inventarme explicaciones con otros estudiantes sobre mi vida y que es lo que me ha llevado a venir a Sevilla. Me ayuda mi juventud, mi cara de niño y la fotocopia manipulada con mi nombre; le he dicho que mis padres estan de viaje y que me enviaran el dni dentro de dos semanas, si lo alargo a un mes estaré satisfecho.
Me cuesta acostumbrarme a este nombre "Ángel", -Te llamas Ángel- me repito cada mañana para no meter la pata.
En fin, he echado en la maleta vieja marrón lo que he podido, menos mal que mañana son las rebajas y que el dinero que me han dado es suficiente para aguantar aqui tres meses, me han dicho que me enviarán mas dinero, a ver si es verdad.
Algo tengo que hacer.. mmm, ya he dicho que estoy estudiando Trabajo Social y tendré que, al menos, comprarme algunos libros y saber donde está la escuela para no levantar sospechas. También tengo que pensar en algún trabajo, pero eso será mas adelante; ahora solo quiero aclararme con el mapa y situar la pensión.
Aquí los inquilinos, de momento, no son muchos, hay un tipo con cara de amargado en las 128, yo por si acaso ni le miro, que me hable él si quiere antes.
Tengo que empezar a conocer gente, o por lo menos inventarme algunos amigos, ya veré lo que hago, son mas de las 12 y mañana tengo que ir de compras.